Cuando estoy en España y alguien me nombra Portugal siempre pienso en lo mismo, Saudade. ¿Por que tengo la sensación de que el pueblo portugués esta anclado a la melancolía?.

Portugal, nuestro hermano país tiene un no se qué que lo hace entrañable. Sus gentes, su estilo de vida, bastante alejado de lo que seria normal en un país tan europeo y tan cosmopolita. Paseando por sus calles vemos continuos trazos de su pasado colonial, ese color en las gentes y a veces ese color en su alma.

Portugal, tan grande y a su vez tan pequeña, plagada de serios problemas, llena de ingeniosas respuestas. Alegre y divertida, sencilla y jovial, la alegría se desparrama por estas calles de Praia da Vitoria, donde cada día es una sorpresa. Climatologicamente también. Se dice que cada día es, en las Azores, una composición de las cuatro estaciones, hace sol, se nubla, llueve y por la noche refresca. ¿ Pensaría en ella Vivaldi cuando compuso "Las cuatro estaciones?.

Mañana será otro dia y sobre el cielo azul y el inmenso oceano brillará otra vez el sol.