Ya se acerca, dentro de unos cuantos días se celebra el famoso día de San Valentín. Que felicidad. La verdad es que hacer saber a la persona que amamos que precisamente no podemos vivir sin ella , es uno de los gestos mas hermosos que se nos pueden presentar.

Hasta hace poco tiempo yo pensaba que lo que hacíamos era felicitar a una persona por estar enamorada, pero no, no es así. Lo que hacemos con el acto de felicitar el día de San Valentín es recordarle a nuestra pareja que nosotros estamos enamorados de ella. Es curioso porque a veces nos puede asaltar la duda. Esto lo aprendí hace poco y me ha dado que pensar, porque ¿cuantas personas no habremos felicitado en el día de San Valentín por no saber si la otra persona estaba enamorada?. Bien, pues lancemosnos a felicitar a diestro y siniestro, a nuestro gato, perro, pajarito o tortuguita, esposa, querida, amante, como sea, quien sea, demostremos nuestro amor a los cuatro puntos cardinales, seamos felices, por Dios, seamos felices, que los malos momentos pasen pronto, que como dice una frase que hace tiempo leí, el amor verdadero no tiene final feliz, el amor verdadero no tiene final. Felicidades.